Se encuentra el lote totalmente cubierto de árboles coníferas, con muchos desniveles producto de la misma duna.
El cliente un aficionado del cine experimental y del parkour que además pensaba la casa para como un centro de integración para quienes practican la disciplina en toda la región y por fuera de la misma. Este fue nuestro punto de partida por el cual creímos que la casa debería transmitir el espíritu y la filosofía del parkour.
En el parkour cuentan con dos conceptos muy importantes, el primero “ser y durar”, el mismo hace referencia a la durabilidad y a la resistencia en el tiempo. El segundo hace referencia a “fluir como el agua y ser solido como la roca” que remite a la fluidez que se genera practicando esta disciplina.
Con estos conceptos, sumados al terreno con sus potencialidades y al programa particular del dueño que quería generar en su casa un centro de reuniones donde se puedan proyectar películas de la misma temática diseñamos una vivienda muy particular.
Debía representar una gran solidez para poder practicar parkour por dentro y fuera de la casa por lo cual se anclaron dos piezas de concreto que emergen desde las ondulaciones del terreno que ya viene con una geometría bien fluida. De allí tomamos estas líneas para poder “fluir” por las cubiertas de la casa y hasta para ubicar gradas interiores y exteriores para proyectar sus películas.
Estas dos piezas de concreto separadas para que los arboles existentes sigan permaneciendo en su lugar y la casa si vincule con el bosque desde todos los ángulos.
Por ultimo, un eje que marca el acceso y la circulación principal bien liviano en acero corten pasa desapercibido en el bosque por fuera y une la casa por dentro.
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